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La industria cosmética de Hong Kong es próspera y ofrece una variada gama de productos de belleza y cuidado personal. Existen reglamentos y normas para garantizar la seguridad y eficacia de estos productos. Los fabricantes e importadores deben conocer la normativa sobre cosméticos de Hong Kong para garantizar la protección del consumidor.
Las dos (02) principales normativas que regulan los cosméticos en Hong Kong son la Ordenanza de Seguridad de Bienes de Consumo (CGSO) (Cap 456) y la Ordenanza de Descripciones Comerciales (TDO) (Cap 362), cuya aplicación corre a cargo del Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales de Hong Kong (C&ED). Según las normas reguladoras de Hong Kong, los fabricantes, importadores y proveedores de productos cosméticos no están obligados a facilitar información sobre el producto a la Autoridad Sanitaria (HA). Sin embargo, deben asegurarse de que la composición, el etiquetado y las alegaciones del producto cumplen la normativa local y las normas internacionales. La normativa pretende impedir la entrada en el mercado hongkonés de productos cosméticos con etiquetas falsas y garantizar que sean razonablemente seguros.
En Hong Kong, los productos cosméticos deben cumplir los requisitos de etiquetado establecidos en la CGSO. Las etiquetas, en las que debe figurar cualquier advertencia o precaución respecto a la conservación, uso, consumo o eliminación de un producto, deben facilitarse tanto en inglés como en chino. Además, las declaraciones no deben contener ninguna información inexacta o engañosa sobre el producto.
En cuanto al mantenimiento de la seguridad y la calidad, Hong Kong reconoce normas internacionales como las de la Unión Europea (UE) o China (CN). De hecho, muchos fabricantes de cosméticos se ajustan a las Buenas Prácticas de Fabricación (BPF) para garantizar la calidad y seguridad de sus productos. Aunque seguir las BPF no es obligatorio, se considera una buena práctica para mantener la alta calidad de los productos.
El Consejo de Desarrollo del Comercio de Hong Kong (HKTDC) ofrece a las empresas orientación y recursos para facilitar el cumplimiento de la normativa. El consejo proporciona información sobre normativas, tendencias del mercado y eventos comerciales, lo que ayuda a los agentes del sector a mantenerse al día sobre la evolución del mercado de los cosméticos.
En conclusión, la normativa sobre cosméticos de Hong Kong es sólida y tiene por objeto proteger la salud de los consumidores y mantener la calidad de los productos. Los fabricantes e importadores deben cumplir la CGSO, lo que garantiza un etiquetado preciso y una comercialización responsable.
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