El etiquetado nutricional ha sido durante mucho tiempo un componente fundamental de la seguridad alimentaria y la concienciación de los consumidores. Estas etiquetas son cruciales para proporcionar información a las personas a la hora de orientar sus elecciones dietéticas. Debido a los cambios que experimentará Canadá en relación con el etiquetado nutricional, especialmente para los alimentos y bebidas suplementados. Estos cambios están en consonancia con el apoyo constante de Health Canada Canada a una alimentación sana y a la transparencia en la industria alimentaria.
Este blog analiza los próximos cambios en el etiquetado nutricional en Canadá. Abarca la evolución de la nueva normativa sobre productos alimenticios y bebidas mejorados, sus implicaciones para los fabricantes y los beneficios para los consumidores.
Panorama actual del etiquetado nutricional en Canadá
El etiquetado nutricional en Canadá, obligatorio desde principios de la década de 2000, incluye información exhaustiva sobre el contenido de los alimentos y bebidas envasados. HC pretende ofrecer información nutricional clara y precisa, que ayude al consumidor, en el proceso de compra, a saber qué comer y a tomar decisiones más saludables.
Actualmente, las etiquetas nutricionales en Canadá se presentan en forma de tabla de información nutricional (NFT), que indica el contenido de nutrientes importantes como grasas, azúcares, sodio, fibra y proteínas. Los ingredientes suelen enumerarse en orden descendente por peso, y el tamaño de las raciones está normalizado para facilitar las comparaciones entre productos similares.
HC ha utilizado recientemente el etiquetado en la parte frontal del envase o FOP en su campaña contra las enfermedades crónicas relacionadas con la dieta, como la obesidad y la diabetes, así como las afecciones cardiovasculares. El etiquetado FOP identifica los alimentos o bebidas que contienen altos niveles de grasas saturadas, azúcares o sodio, lo que facilita a los consumidores la identificación de los productos con perfiles nutricionales menos favorables.
Próximos cambios en el etiquetado nutricional de los complementos alimenticios y las bebidas
Uno de los cambios más notables en la normativa de etiquetado de alimentos del país serán los nuevos requisitos para los alimentos y bebidas suplementados. Los alimentos complementados son aquellos a los que se han añadido vitaminas, minerales u otras sustancias específicas (como cafeína o aminoácidos) para proporcionar beneficios adicionales para la salud más allá de la nutrición básica.
¿Por qué el cambio?
Los alimentos y bebidas funcionales se han puesto de moda en los mercados canadienses, pero sus etiquetas no eran transparentes en cuanto a nutrientes añadidos y posibles efectos sobre la salud. Por ello, HC está introduciendo nuevas normas de etiquetado que harán que los consumidores sean más conscientes de lo que comen y lo que beben.
Las nuevas normas atenderán a:
- Claramente diferenciados de los demás alimentos - Completamente claros sobre las características del alimento ofrecido.
- Lista visible de vitaminas, minerales u otras sustancias añadidas utilizadas con las cantidades contenidas.
- Precauciones sobre posibles riesgos para la salud, como niveles excesivos de determinadas vitaminas o cafeína, según proceda.
- Precauciones sobre posibles riesgos para la salud, como niveles excesivos de determinadas vitaminas o cafeína, según proceda.
El cambio afectará a la mayoría de bebidas y alimentos, por ejemplo, bebidas energéticas, aperitivos enriquecidos, aguas mejoradas y bebidas sustitutivas de comidas.
Elementos clave de los nuevos requisitos de etiquetado
La revisión de los requisitos de etiquetado nutricional de los alimentos y bebidas complementados introducirá cambios significativos en la forma de comercializar y presentar estos productos a los consumidores. A continuación se exponen algunos de los elementos más importantes:
- Etiquetado frontal: A partir de ahora, los alimentos y bebidas complementarios llevarán etiquetas más visibles en la parte frontal del envase que indiquen específicamente los nutrientes añadidos, como vitaminas o cafeína. Este cambio garantiza que los consumidores puedan identificar rápidamente lo que se ha añadido al producto y comprender cómo contribuye a su ingesta dietética.
- Transparencia de los ingredientes: La nueva normativa exigirá listas detalladas de ingredientes que especifiquen la fuente de los nutrientes suplementados, como "vitamina D añadida" o "cafeína añadida". Este nivel de transparencia pretende ayudar a los consumidores a tomar decisiones más informadas sobre los productos suplementados que eligen consumir.
- Advertencias y consejos de prudencia: Algunos alimentos complementados, en particular los que contienen cafeína u otros estimulantes, deberán incluir advertencias. Estas advertencias están diseñadas para informar a los consumidores de cualquier riesgo potencial para la salud, especialmente si el producto se consume en exceso o por poblaciones vulnerables como niños, mujeres embarazadas o personas con condiciones de salud específicas.
- Tamaño normalizado de las raciones: Para facilitar la comparación entre diferentes productos, se exigirán tamaños de ración normalizados en las etiquetas de los alimentos complementados. Este cambio garantizará que los consumidores puedan comparar con exactitud el contenido en nutrientes de productos similares y evitará afirmaciones engañosas sobre el tamaño de las raciones.
- Tabla de información nutricional (NFT): La NFT de los alimentos complementados incluirá información adicional sobre los nutrientes añadidos y su porcentaje de la ingesta diaria recomendada. Esto permitirá a los consumidores comprender mejor el papel que desempeñan estos nutrientes en su dieta general y si están consumiendo una cantidad adecuada.
Impacto en los fabricantes
Para los fabricantes de alimentos y bebidas suplementados, los nuevos requisitos de etiquetado nutricional presentarán tanto retos como oportunidades. El cumplimiento de la normativa actualizada exigirá que las empresas inviertan en nuevos envases, evaluaciones de ingredientes y, potencialmente, incluso reformulaciones de sus productos. Sin embargo, estos cambios también suponen una oportunidad para generar confianza entre los consumidores al ofrecer una mayor transparencia y alinearse con los objetivos de HC de promover hábitos alimentarios más saludables.
Retos para los fabricantes:
- Rediseño de etiquetas y cumplimiento de la normativa - Los fabricantes tendrán que rediseñar las etiquetas para cumplir la nueva normativa, lo que supondrá costes de rediseño, impresión y distribución. El cumplimiento es fundamental para evitar sanciones o la retirada del producto.
- Reformulación de productos - Algunos productos pueden tener que reformularse para cumplir la normativa, especialmente cuando determinados ingredientes, como la cafeína o el azúcar, superan niveles específicos que requieren etiquetas de advertencia. La reformulación puede ser costosa, pero, por otro lado, los fabricantes tienen la oportunidad de mejorar el perfil nutricional de sus productos.
- Educación y formación - Los fabricantes deben educar al equipo sobre las nuevas normas y deben asegurarse de que, desde la producción hasta el mercado y también hasta la distribución, se opera de acuerdo con las directrices de HC. Para ello, es necesario volver a formar a las personas de la organización sobre los procedimientos de cumplimiento y contratar a consultores reguladores que ayuden a navegar por las laberínticas normas.
Oportunidades para los fabricantes:
- Mayor confianza del consumidor: Las nuevas normas abren la puerta a que los fabricantes de alimentos refuercen las relaciones con el consumidor final demostrando su compromiso con la transparencia y la salud. Unas etiquetas explícitas y objetivas pueden hacer que un artículo destaque en el mercado y ayudarán a los propietarios de marcas a diferenciarse como proveedores fiables de alimentos saludables y funcionales.
- Productos orientados a la salud: La demanda de alimentos y bebidas funcionales puede empujar a las empresas a desarrollar productos más saludables que se ajusten a las nuevas directrices de etiquetado y a las preferencias de los consumidores.
- Crecimiento del mercado: Esto permite a los fabricantes aprovechar la creciente demanda de los consumidores de productos alimenticios transparentes y conscientes de la salud, al tiempo que cumplen con la nueva normativa de HC. Esto también presenta una oportunidad de exportación en mercados que conceden un valor similar a dicha transparencia en el etiquetado.
Conocimiento y ventajas para el consumidor
El objetivo principal de estos requisitos actualizados de etiquetado nutricional es mejorar la concienciación de los consumidores y ayudar a los canadienses a elegir alimentos más sanos e informados. Con etiquetas más claras que proporcionen información detallada sobre los ingredientes suplementados, los consumidores estarán mejor equipados para evaluar el valor nutricional de los alimentos que compran.
Mayor transparencia: Esto llevaría a un nuevo etiquetado en la parte frontal del envase y a listas detalladas de ingredientes que facilitarían a los consumidores la comprensión de lo que están comiendo, especialmente en relación con los nutrientes añadidos. Como ahora los consumidores pueden acceder a información tan rápida como la cantidad de cafeína o vitaminas añadidas, pueden elegir opciones más sanas que se ajusten a sus ideales de buena salud.
Reducir los riesgos para la salud: La normativa incluirá advertencias sobre los peligros de un consumo elevado para los consumidores, en particular los más vulnerables, con el fin de garantizar una alimentación más segura.
Conclusión
Con la transición a los nuevos requisitos de etiquetado nutricional de Canadá para alimentos y bebidas suplementados, tanto los fabricantes como los consumidores deben adaptarse a la evolución del panorama. Con la experiencia reguladora de Freyr, los fabricantes pueden navegar por estas regulaciones desafiantes, que no sólo presentan obstáculos, sino que también crean oportunidades para mejorar la transparencia y construir la confianza del consumidor. Para los consumidores, las etiquetas actualizadas ofrecerán información más clara y detallada, lo que les permitirá tomar decisiones más sanas e informadas. Este cambio hacia la transparencia y la conciencia sanitaria refleja las tendencias mundiales en materia de reglamentación alimentaria y sitúa a Canadá a la cabeza de la promoción de la salud pública a través de un mejor etiquetado de los alimentos.