
¿Se acuerda? Hace un par de días hablamos de la norma de seguridad final de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) para los jabones antibacterianos. Tras el llamamiento de la FDA de EE.UU. para la prohibición de ingredientes específicos, Japón se convierte en la primera fuerza de implementación en APAC anunciando que ya han implementado la prohibición de ingredientes.
En un anuncio, el Ministerio japonés de Sanidad, Trabajo y Bienestar (MHLW) informó de que han eliminado los ingredientes sugeridos de productos medicinales como jabones, jabón de manos, gel de ducha y limpiador facial.
¿Cuál fue la causa de la prohibición?
Anteriormente, la FDA estadounidense había publicado una norma de seguridad definitiva en la que se detallaba la prohibición impuesta a 19 ingredientes utilizados en jabones antibacterianos. Razonando que la prohibición propuesta se debía a que los fabricantes no habían presentado los informes necesarios sobre los ingredientes mencionados, la FDA estadounidense había dado un plazo claro de un año para poner en práctica la prohibición. Descodifique aquí la norma final de seguridad y todo lo que necesita saber.
La lista de ingredientes prohibidos incluye los siguientes:
- Cloflucarban
- Fluorosalan
- Hexaclorofeno
- Hexilresorcinol
- Yodóforos (ingredientes que contienen yodo)
i) Complejo de yodo (éter sulfato de amonio y monolaurato de sorbitán polioxietilenado)
ii) Complejo de yodo (éster fosfato de alquilariloxipolietilenglicol)
iii) Nonilfenoxipoli(etilenoxi)etanoliodo
iv) Complejo poloxámero-yodo
v) Povidona yodada 5 a 10 por ciento
vi) Complejo yodado de cloruro de undecoylio
- Cloruro de metilbencetonio
- Fenol (superior al 1,5%)
- Fenol (menos del 1,5 por ciento)
- Amiltricresoles secundarios
- Oxicloroseno sódico
- Tribromsalan
- Triclocarbán
- Triclosán
- Triple tinte
Los informes indican que el triclosán y el triclocarbán son los dos ingredientes más utilizados en la región de Asia-Pacífico y en todo el mundo, por lo que la aplicación en Japón supone un gesto de bienvenida a la prohibición, que por supuesto hace hincapié en la seguridad del paciente, desde el principio. Se recomienda a los fabricantes de jabones antibacterianos de todo el mundo que se mantengan al corriente de esta información reglamentaria para cumplirla con éxito y reducir el tiempo de comercialización.