¿No es interesante ver cómo la inteligencia artificial (IA) se está labrando una posición próspera en el panorama normativo? Una de las razones más importantes de este avance es la capacidad de las aplicaciones de IA y aprendizaje automático (ML) para abordar los retos procedimentales cotidianos y los problemas lógicos a los que se enfrentan los responsables de cumplimiento normativo.
La IA gestiona de forma competente enormes cantidades de información con rapidez y precisión, lo que teóricamente puede renovar el cumplimiento de la normativa. Es seguro decir que en un futuro próximo la tecnología puede ayudar a los fabricantes a comprender fácilmente las obligaciones de cumplimiento y tomar las medidas pertinentes. Y, en última instancia, el uso continuo de la IA en el ámbito normativo puede reducir en gran medida la necesidad de personal en los procedimientos.
En una organización dedicada a las ciencias de la vida, las aplicaciones de software que se integran con la IA mejoran la eficiencia de muchas funciones en los procedimientos de cumplimiento normativo. Aunque las posibles ventajas de las innovaciones tecnológicas en IA y ML ilimitadas, las aplicaciones actuales de la IA en los programas de cumplimiento ya han demostrado al menos tres beneficios para el cumplimiento normativo. Entre ellos se incluyen la eliminación de falsos positivos, la reducción de precios y la corrección de errores humanos.
Además, durante el proceso de descubrimiento de fármacos, se observa que la IA tiene una enorme capacidad e influencia en la evaluación de conjuntos de datos desafiantes para ejecutar el desarrollo de fármacos. Por otro lado, la identificación humana de nuevas moléculas ha sido relativamente lenta y menos eficiente. La experiencia en bienestar digital y la IA han transformado las operaciones de los ensayos clínicos. Aparte del aspecto regulatorio, la IA también es útil para la vertiente comercial del negocio de las ciencias de la vida, es decir, para realizar ventas y marketing, de forma eficiente.
Importancia de la IA en las operaciones reguladoras
La tecnología reguladora, comúnmente conocida como RegTech, es un área de la tecnología digital en rápida expansión. Su objetivo es simplificar el cumplimiento de la normativa e introducir la automatización.
En todo el mundo, los organismos reguladores se enfrentan al obstáculo de examinar los métodos y procedimientos dentro de sus propias industrias. A menudo, las empresas acaban realizando importantes inversiones para adaptarse a la normativa, lo que aumenta sus gastos de cumplimiento. Mediante la introducción de Big Data e IA, tanto las organizaciones como los funcionarios pueden garantizar un cumplimiento normativo racionalizado.
Beneficios de la IA
IA y Big Data en el cumplimiento de la normativa
Las empresas pueden influir en la IA y el Big Data como un componente de su plan de tecnología reguladora para garantizar el cumplimiento en el mundo actual centrado en la información. Las empresas pueden agilizar sus procesos integrales introduciendo IA y Big Data para hacer compatible su entidad empresarial.
Simplificación del proceso de cumplimiento
A menudo, las empresas se quedan cortas a la hora de cumplir diversos requisitos simplemente porque confían en tediosas tareas manuales. El proceso de cumplimiento normativo implica principalmente la recopilación de información a través de distintas fuentes, la verificación de la información y su posterior presentación a los organismos reguladores. Sin automatización, todo este proceso resulta engorroso, costoso y laborioso. Sin embargo, el uso de Big Data e IA puede reducir significativamente los fondos y plazos necesarios, al tiempo que disminuye los errores.
Seguimiento de los cambios normativos
Las directrices normativas cambian de vez en cuando debido a diversas fuerzas del mercado. Si una organización no se adapta a las nuevas normativas, puede poner en peligro su reputación y acarrear sanciones económicas o incluso acciones legales. Los productos de IA y Big Data pueden ayudar a las empresas a cumplir la normativa manteniéndolas al día de los últimos cambios reglamentarios. Las herramientas de IA y Big Data utilizan el procesamiento lingüístico nativo y el aprendizaje profundo para comprender los requisitos de cumplimiento y notificarlos a las empresas.
Mejorar la toma de decisiones
Las empresas pueden garantizar procesos de cumplimiento normativo inteligentes utilizando IA y Big Data. Quizá el valor más importante que la IA y los macrodatos aportan a las empresas es que les permiten comprender y prever los complicados patrones de gestión de riesgos y datos. La IA y los macrodatos pueden ser la columna vertebral de los organismos reguladores.
La IA hace eficiente el cumplimiento de la normativa
Las tecnologías, como el aprendizaje profundo y el aprendizaje automático, también facilitan a las organizaciones reguladoras la supervisión de las unidades. En lugar de ejecutar auditorías periódicas, que a menudo son problemáticas y consumen mucho tiempo, las empresas pueden supervisar fácilmente sus limitaciones de cumplimiento. La aceptación de la IA y los Big Data puede agilizar el proceso de cumplimiento.
En pocas palabras, la combinación de IA y tecnología puede dar forma a la industria reguladora y aportar avances en los procedimientos de cumplimiento en todo el mundo. Para alinearse con la transformación digital, se aconseja a las empresas que se mantengan al tanto de las normativas en constante evolución y sigan adelante con los procedimientos de conformidad. Manténgase seguro. Cumpla la normativa.